Un sofá Chester de tres plazas tapizado en piel con acabado blanco ofrece un diseño elegante y atemporal. Este acabado capitoné no solo aporta una apariencia sofisticada, sino que también proporciona una textura acolchada y lujosa al tacto. El sofá, con sus líneas estructuradas y brazos ligeramente elevados, combina confort y estilo en una pieza que sirve como un punto focal distintivo en cualquier espacio.